No sé a vosotros..

Pero a mí me pasa que cuando más pillada voy de dinero, más ganas me dan de irme de compras…es que es automático.

Este mes voy a estar a dos velas porque el cole de las ratonas me ha cobrado los libros (que eso merece un blog aparte porque manda narices lo que cobran por unos «libros» para 2 enanas de 2 y 4 años, pero eso será otro día) a parte de lo que me clavan ya, por lo que lo de este mes ha sido «hola sueldo», y «adiós sueldo, hasta el mes que viene» en un pis pas..

Bueno, exagero un poquito porque todavía me queda para comer lentejas todo el mes pero es que siempre me pasa…cuanto menos tengo…más ganas de irme de compras.

Además, desde que Zara se puso online yo me he convertido en su clienta número uno…un peligro vamos. Tengo varias cosas fichadas pero ahora he fichado cosas para las enanas que son moníiiiiiiiiiiisimassssssssss y sobre todo nada ñoñas.

Me encanta que vayan con vestidos y cosas así pero ese look  con un lazo más grande que su cabeza como que no me acaba de convencer..seguramente las estaré traumando de por vida al ser las únicas de su clase a los que no se les dobla el cuello por el peso del lazo que llevan en su cabeza:

Yo he de reconocer que me gusta vestirlas más como mini adultas pero una corre el riesgo también de pasarse o de arruinarse porque por vestirlas con ropa que no es de la del lazo (que por cierto es carísima) te puedes quedar más pobre que yo a principios de mes.

En fin, estamos apenas a día 7 y quedan 4 semanas de mes por lo que la agonía será lenta y eterna porque el mes que viene me va pasar un tanto de lo mismo porque yo no sé cómo lo hacen pero en el colegio de las ratonas, jamás y que conste que es un jamás verdadero, me cobran lo que se supone me tiene que cobrar porque siempre siempre hay un extra que añadir y que por su puesto a mí se me ha olvidado.

En fin, los fichajes que tengo en Zara y Mango tendrán que esperar pero estoy segura de que no tanto porque mentalmente voy a encontrar la excusa perfecta para justificarme a mí misma que soy embajadora no reconocida ni pagada de Loreal: porque yo lo valgo!

Bueno, os deseo un feliz comienzo de semana y continuación de mes…que no se os haga tan largo como a mí!

Saludos pobretones,

Grumpster

 

Receta nº55: Calabaza, coco y chili

Esos son los 3 ingredientes principales de lo que preparé anoche.

Es una receta del nuevo libro de mi héroe por excelencia Hugh FearnleyWhittingstall y está buenísima y para variar muy fácil de hacer. He de decir que las fotos son malísimas pero es que cuando me puse a cocinar me di cuenta de que tenía que hacer fotos y como que no estaba para ponerlo todo mono y la luz no era muy buena…así que las fotos no hacen justicia a lo bueno que quedó.

Empecemos pues:

Ingredientes:

  • 800 gramos-1 kg de calabaza cortada en dados
  • 1 cebolla cortada en juliana
  • 2 dientes de ajo cortados en láminas
  • 1 chili rojo (yo no tenía así que use chili seco)
  • 1 cucharada sopera de vuestro curry favorito (ya sea en polvo o en pasta. Yo opté por korma)
  • 1 lata de leche de coco
  • 1 chorrito de limón o lima ( a mí se me olvidó)

Pues lo primero es sofreir la cebolla durante unos 10 minutos:

Una vez que haya cogido colorcito, añadirle al ajo y el chile y remover una par de minutos:

Y ahora el curry de vuestra elección y lo mismo, removerlo durante un par de minutos:

El olor en este momento es estupendo! Le añadimos la calabaza y rehogamos durante 5 minutos:

Añadimos la leche de coco, mezclamos, ponemos la tapa…

Entre 10-15 minutos más tarde….disfrutaréis de un delicioso curry vegetariano. En mi caso lo serví con arroz integral y cilantro fresco:

Siento que la foto sea tan mala porque no le hace justicia!!! De hecho se ve un poco tirando a cutre…

En fin, espero que os fiéis de mí cuando os digo que vale la pena..

Feliz finde 🙂

Saludos calabaceros,

Grumpster

 

 

 

Receta nº54: Mermelada de fresa

Sí lo sé…van 3 mermeladas en un mes más o menos. Pero es que me ha dado por hacer mermeladas y esta receta la tenía guardada en la retaguardia por si no tenía qué publicar.

Como no quiero ser igual de impresentable que la semana pasada pues he pensado que mejor publicar esta receta (que es súper fácil y está buenísima) que acabar desaparecida en combate.

Tengo un libro de conservas y mermeladas del que ya os he hablado antes, que es estupendo pero he de decir que en algunas de las recetas de las mermeladas utiliza una cantidad indecente de azúcar, cosa que en el caso de la mermelada de fresa decidí que no iba a seguir porque solo con leer la cantidad de azúcar que ponía, me dolían los dientes de solo pensarlo.

Así que como a mí lo de improvisar en la cocina me va más que bailar salsa pues decidí ir por libre. Para que veáis a qué se a limitado mi vida aventurera: a ponerle menos azúcar a la mermelada guauuuuuuuuuuuuuuuuuu Indiana Jones apártate que para riesgos yo!!!

Muy triste mi vida…jajajaja

Bueno, a lo que iba, mermelada de fresa. Empecemos pues:

Ingredientes:

  • Fresas (yo usé una bolsa de 750 gramos de fresas congeladas que venden en Lidl)
  • 375 gramos de azúcar
  • el zumo de un limón (pepitas incluidas)

Lo primero es poner es mezclarlo todo en una olla y dejar que las fresas empiecen soltar agua:

En menos de media hora ya tenía este aspecto:

Y luego ya es empezar a cocinar.  Al principio tenéis que mezclarlo todo muy bien y remover hasta que se disuelva el azúcar y una vez que empiece a hervir seguir removiendo:

Aviso a navegantes!!: tened mucho cuidado porque cuando está en plena ebullición, si lo removéis para que no se pegue eso va a empezar como un volcán y os podéis quemar con un trozo de fresa volátil, así que si removéis hacerlo con una cuchara de mango muuuuuyyyyyyyyyy largo y bajar el fuego.

Y así, hasta que espese. En mi caso unos 15-20 minutos:

Ahora sólo queda envasar:

Y comérsela:

Hacerla que es facilísima.

Ánimo que mañana es miércoles!

Saludos freseros,

Grumpster

Grumspter