Esté postre es ganador. De los buenos.
Muy fácil de hacer y queda de lujo. Lo único que os aconsejo es que el chocolate negro que compréis que sea lo mejor que podáis, bueno en la medida de lo posible claro.
Además se «cocina» en la nevera. Y lo podéis adaptar cada vez que lo hagáis a lo que tengáis en casa: las galletas que he usado son las yayitas de miel de toda la vida pero lo voy hacer para fin de año con digestivas. Lo podéis hacer con amaretti o de gengibre o vuestra galleta favorita. Las posibilidades son infinitas! Tantas como galletas!
Las fotos son pésimas porque lo hice por la tarde-noche. Pero el sabor es estupendo!
Empecemos por los ingredientes:

Ingredientes:
- 160 gramos de galletas
- Un poco de mantequilla derretida (para que haga de pegamento de las galletas una vez hechas polvo)
- 300 gramos de chocolate negro con un mínimo de 70% de cacao
- 3 cucharadas soperas de agave (si no tenéis con miel os vale)
- 5-6 cucharadas de café solo (si no tenéis café verdadero con café soluble va que chuta)
- 450 ml de nata para montar (lo sé es una pasada pero como es un postre para unos cuantos, la gordura se reparte ;))
Bien, lo primero es forrar un molde con cling film o plástico. Mi consejo es que para que se quede pegado al molde pongáis un poco de aceite y luego que lo pongáis lo más estirado posible porque si no cualquier pliegue que quede se quedará marcado en el pastel (cosa que evidentemente yo no hice):

Luego hay que hacer unos cuantos pasos. Lo primero es hacer las galletas polvo. En mi caso y por suertuda lo hice en el robot de cocina en 5 segundos. Si no tenéis un robot es cuestión de meter las galleta en un bolsa de plástico y darle golpes hasta que quede con este aspecto:

Lo mezcláis ahora con la mantequilla derretida y reserváis. Toca ahora derretir el chocolate junto con el agave al baño maría. Una vez esté derretido, dejar que se enfríe un poquito. Mientras tanto toca montar la nata:


Bien, una vez que la nata está montada y el chocolate un poco menos caliente mezcláis la mitad de la nata con el chocolate de manera envolvente y muy despacio hasta que esté todo bien mezclado. Una vez mezclado, le añadís el café y el resto de la nata y seguís mezclando de la misma manera.



Ahora toca hacer el pastel como quien dice. Lo primero es con la mitad de las galletas con mantequilla hacer la primera capa: verterlo en el molde y aplastar:

Luego le añadís la mitad de la mezcla de chocolate. Le añadís la otra mitad de galletas y aplastáis con cuidado para añadirle la otra mitad de la mezcla de chocolate:


Y ahora lo metéis en la nevera hasta que la cosa se consolide…unas 6-8 horas. Lo desmoldáis con mucho cuidado y listo. Nada mejor que servirlo con un cafecito:

Espero que lo disfrutéis.
Feliz navidad!
Saludos chococafeteros,
Grumpster