Buenas,
Hoy es domingo y me puedo sentar a escribir con menos interrupciones de las habituales (dicho esto tengo a Grumpster Jnr a mi vera tratando de contarme una cosa a la vez que canta la última canción de Kate Perry) y os quería contar mi semana.
Ya sabéis que mi vida es un tanto rutinaria y que por hacer, hago poco aparte de trabajar y estar con las enanas. Pues bien, esta semana he salido 2 noches!! Toma yaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa no me lo creo ni yo jajaja!
El miércoles, mi adorable amigo Galisteo, que dicho sea de paso es un auténtico genio y da las mejores recomendaciones para comer en Madrid en los sitios más chulos sin que necesites comer lentejas el resto del mes, me invitó a un taller que él organizaba para el Mercado de San Antón. Más que taller era un poco demonstración de cupcakes fusionando sabores de oriente con los de toda la vida:
Fue de lo más interesante, sobre todo por las anfitrionas que fueron súper amables y generosas a la hora de compartir sus recetas e ideas. Yo he de reconocer que ya no hago tantas tartas como antes, sólo las hago para los cumples de las enanas pero siempre es interesante aprender cosas y trucos nuevos. Sobre todo me descubrieron un ingrediente nuevo que espero poner en práctica pronto en el blog!
Y luego, ayer por la noche fue a mi primer evento Kinfolk:
Todo fue organizado por Ana y Elena, 2 hermanas simpatiquísimas también conocidas como Butter&Fly.
La idea es ir a cenar- en este caso el sitio era la tienda más bonita del mundo mundial Federica & Co, que dicho sea de paso es una de las mejores cocineras del mundo mundial- y llevar una receta que te guste mucho, en mi caso los pastelitos de arroz que hice el otro día. Esa era la excusa, bueno, la excusa era la presentación del libro de recetas de Kinfolk, que por su puesto acabaré comprando pero en realidad fue una manera de conocer gente.
He de reconocer que al principio me quedé un poco cortada entre otras cosas porque fue más gente de la que pensé y eso de llegar sola como que te impone un poco, más que nada porque todo el mundo fue con una amiga así que ahí llegué yo como mujer uva y al principio me costó un poco porque aunque no os lo creáis soy muy tímida cuando me encuentro en estas situaciones.
La cosa mejoró cuando nos sentamos a cenar la comida más deliciosa que he probado en mucho tiempo, saltándome por su puesto el penúltimo día de detox. Y al final me lo pasé muy bien y conocí a gente estupenda, estuve hablando casi toda la noche con Marina, que es muy linda por dentro y por fuera y resulta que había visto su blog justo hace unos días y Pati de Uranita que aunque no hablamos tanto también es un solete.
Al final llegué a casa contenta, cansada y muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuy coja porque este esguince de rodilla me ha cogido cariño y no me quiere dejar.
En fin, que mola salir de vez en cuando y conocer a gente nueva con ideas nuevas.
Feliz domingo,
Saludos interesantes,
Grumpster