Hola,
No sé vosotros, pero ¿no habéis estado en esa situación en la que os da una pereza que te mueres cocinar, pero sabes que tienes que hacer algo que no sea cocer un poco de pasta, abrir una lata de atún y un bote de tomate frito porque si no ya sería la 4ª vez que lo haces en un espacio de tiempo extremadamente corto?
Pues bueno, aquí os doy una » receta» que aún no siendo gourmet, por lo menos te quedas con una sensación mejor de cuando haces macarrones con tomate. Como veréis no la he clasificado como tal porque la verdad no la considero una receta propiamente dicha.
Así que podemos decir que es una receta alternativa.
La he hecho con champiñones pero podéis simplificarlos muchísimo más haciéndola directamente de jamón y queso o también incluso usando sobras (pollo, pescado, verduras o con cualquier cosa que le pondriáis a una tortilla francesa). Es muy fácil de hacer. Las fotos no son de las bonitas porque ya no era de día y no había luz natural y porque me dí cuenta de que podía ser material de blog precisamente en el momento que se me ocurrió hacerla, por la noche.
He de aclarar también que no es para mí, sino para mr grumpster y las enanas porque por el detox de la narices sólo puedo comer los champiñones y cebolla. La banda sonora de cómo es mi vida en estos momentos de no poder comer nada y de tener que preparar la cena para el resto del personal, no para de sonar en mi cabeza…para que veáis que mi masoquismo es extremo.
Empecemos pues:
Ingredientes:
- Masa quebrada no congelada (la venden en el super lista para desenrollar, suele estar en la misma sección que la pasta fresca o tortilla de patatas)
- 4 huevos
- 250 ml nata para cocinar
- 1 cebolla pequeña
- 6-7 champiñones picaditos
- 1 loncha de jamón picada
- queso rallado
Lo primero como siempre es encender el horno a 180ºC-º190ºC.
Y luego pues es tan fácil como desenrollar la masa en una fuente y ahora tenéis 2 opciones: ó cocer la masa primero durante unos 10 minutos o hacerla directamente sin precocer la masa. Si estáis muy cansados o no tenéis tiempo ni os molestéis en precocerla pero aseguraros de que la base se hace durante un poco más de tiempo sino quedará un poco blandengue, pero he de decir a que a mucha gente le gusta así. En esta ocasión tenía tiempo así que la cocí un poquito.
Mientras se cocía un poco la masa, cociné la cebolla con los champiñones y mezclé la nata con los huevos:
Y luego fue tan sencillo como añadirle los ingredientes a la base:
Ahora la metéis en el horno unos 25 minutos y si no os dá pereza mientras se cocina, podéis preparar una ensalada para acompañarla.
El resultado final es este:
Tarrrraaaaaaaaaa: quiche de champiñones, jamón y queso, una deliciosa alternativa a los macarrones con tomate!
Si pasáis de los champiñones y de precocinar la base, tardáis menos de 10 minutos en prepararla y 25 en tenerla lista.
No sólo os sentiréis encantados de haber hecho algo distinto sino que además la disfrutaréis.
Ya me contaréis si os gusta.
Saludos,
Grumpster.
I need a Herooooooooooooooooooooooooo