Hola!
Mucho tiempo sin escribir y algunas novedades que contar.
La primera que hace unas semanas cumplí 40 años y Grumpster Jnr 7. Me impresionan más los suyos que los míos he de decir, sobre todo teniendo en cuenta que desde que compartimos cumpleaños, el mío ha pasado a un segundo plano.
Todo el mundo me pregunta, «¿Qué tal sienta cumplir 40?» No he notado mucha diferencia que digamos a los 39.
Algunos cambios se han producido o están en proceso de pero más que por cumplir los 40 por las circunstancias de la vida y los tiempos en los que ocurren, que por pura casualidad están coincidiendo con cumplir más años.
Es una época de cambios, de quitarse lastres que una lleva cargando desde tiempo inmemorial más por hábito y costumbre que otra cosa. Llega un momento en la vida en el que tienes que quitar de la misma todo aquello que te hace daño o te hace ser no tan buena persona. Y en eso he estado y estoy.
Es algo que cuesta porque como siempre he dicho, soy mi peor enemiga y el lastre de la culpabilidad es el que más cuesta quitarse de encima, pero voy progresando.
Del año pasado a este mi vida ha dado un cambio radical, de esos de 180 grados y a mejor. Con mi cumple y el de Grumpster Jnr sobre todo me estoy dando cuenta de cómo pasa el tiempo de rápido. Veo a la enana y ya no es una enana, es una mini señorita con un corazón de oro y lo mismo de la ratona.
El cambio de vida me facilita las cosas bastante. Mi vida ahora es mucho más sencilla y simple. Quizás no tan sofisticada o interesante para algunos, no lo niego pero me encanta el hecho de que no es complicada, estresada y que mi máxima preocupación es cómo enseñar a las ratonas de defenderse de niños tontos en el patio.
No tengo los estreses de la oficina, los cotilleos, el politiqueo, el no llego, el ir corriendo de un lado para otro tratando de ganarle al tiempo unos segundos, el no tener tiempo para sentarme y escuchar a las ratonas con toda mi atención mientras me cuentan que han hecho un nido con flores por si un puerco espín decide pasearse por el jardín de casa.
Estoy como Elsa en Frozen cantando «Let it go»
Si cumplir los 40 significa que no tengo tiempo para eso, me muero de ganas de cumplir los 41!! Así que en eso estoy, soltando lastres 😉
Prometo ir contando los progresos. Y como últimamente me ha dado por dejar canciones que me molan, os dejo esta que me gusta mucho:
Os deseo una semana estupenda.
Saludos liberadores,
Grumpster